sábado, 10 de noviembre de 2012

Sylvia Plath Biografía


Sylvia PlathL
a poetisa Sylvia Plath, quien también cultivó la prosa y el ensayo, nació el 27 de octubre de 1932 en Boston. Desde muy pequeña, manifestó interés por el mundo de las letras: su primer poema lo publicó con sólo ocho años de edad y, a partir de allí, comenzó a explotar su talento literario a través de cuentos y versos que presentaba en diversas revistas estadounidenses y que le permitieron alcanzar un cierto éxito.


En 1955, la joven Sylvia, que ya para ese entonces padecía varios desórdenes mentales y tenía una conducta depresiva, se graduó con honores en el Smith College, no sin antes haber sido tratada en una institución psiquiátrica debido a un intento de suicidio.

Con sus desequilibrios emocionales aparentemente controlados y con sus estudios terminados, Plath fue beneficiada con una beca Fulbright, que le permitió profundizar sus conocimientos en la Universidad de Cambridge. Allí continuó con su obra literaria y participó del periódico universitario “Varsity”. En ese entorno estudiantil, la poetisa conoció al inglés Ted Hughes, con quien se casó el 16 de junio de 1956 y tuvo dos hijos, Frieda y Nicholas.

Ya separada a causa de una infidelidad de su marido, con dos niños a cargo, enferma y casi sin dinero, Sylvia Plath volvió a pensar en el suicidio. Y así fue como, el 11 de febrero de 1963, cuando tenía sólo treinta años y después de haberle preparado el desayuno a sus hijos, se quitó la vida asfixiándose con gas.

Dentro de su legado literario, se destacan obras como “El coloso”“Ariel”“Cruzando el agua”“Árboles de invierno”“La campana de cristal”“Cartas a casa”“Johnny Panic y la Biblia de sueños” y “The magic mirror” (su tesis para el Smith College), entre otras. En materia de galardones y reconocimientos, cabe destacar que, en 1982, a título póstumo, se le concedió a esta escritora el Premio Pulitzer por sus “Poemas completos”.

Sylvia Plath "Mas allá de los Mitos"


La historia de la escritora estadounidense Sylvia Plath (Boston, 1932 / Inglaterra, 1963) y del escritor inglés Ted Hughes es una historia llena de mitos y ha sido comparada con un Romeo y Julieta post-feminista. Ahora, con la publicación en España de Los diarios de Sylvia Plath,- que, tanto en español como la nueva edicición inglesa, incluyen fragmentos, antes censurados por Ted Hughes- salen, de nuevo, más artículos sobre la pareja, como ocurrió con la publicación del libro de poesía de Ted Hughes, Cartas de cumpleaños en 1998que escribió durante 25 años tras el suicidio de Sylvia Plath.

Sylvia Plath es una mujer importante no por haberse suicidado, o por haber estado casada con Ted Hughes, o por ser un símbolo del feminismo. Es importante porque, habiendo sufrido, ella tuvo la necesidad y la valentía absoluta de mirar y expresarlo todo con una sinceridad a veces escalofriante. En su diario escribe (17/7/57): "Escribiré hasta que empiece a escribir sobre mi yo verdadero".

En vida, Sylvia Plath publicó la novela La campana de cristal, el libro de poemas El coloso y un poema para la BBC titulado Tres mujeres (además de muchos poemas y cuentos sueltos en revistas). Tras su muerte, Ted Hughes publicó otros de sus libros y en 1981, Collected Poems de Sylvia recibió el Premio Pulitzer.

Y, aunque la mayoría de la gente considera los escritos de Plath algo deprimentes, como dice Anne Sexton, otra escritora norteamericana, amiga de Sylvia, "quizá la mente creadora que explora sus angustias más profundas sea el único espejo que el arte pueda ofrecernos hoy, y es muy posible que la única liberación de un mundo que niega los valores del amor y la vida sea precisamente el mundo de la muerte".

El mito de Sylvia nos la dibuja como víctima de un mundo machista y víctima de un marido que la abandona, y como una americana en el exilio. Por otra parte, nos encontramos con el mito de Sylvia como poeta maldita y suicida, enfermiza y algo loca, demasiado atrevida para no dañarse a sí misma.
Pues bien, Sylvia no era una víctima del exilio por el hecho de ser una americana en el extranjero. Ella decía que se encontraba mejor en Europa que en su propio país, aunque sí echaba de menos a sus familiares. Sylvia era una persona que se hubiera sentido extranjera en cualquier país. Como dice en su novela semi-autobiográfica La campana de cristal, "[...] tenía que estar pasándomelo en grande, [...] tenía que estar ilusionada como las otras chicas, pero no conseguía reaccionar. Me sentía quieta y vacía [...] como el ojo de un tornado, moviéndome sin ninguna fuerza..."

Y es tras el viaje a Nueva York, cuando experimenta estas sensaciones, cuando, tanto en la novela como en la realidad, ella intenta quitarse la vida por primera vez.
Respecto al machismo y el abandono de su marido como posibles causas de su suicidio, hay que recordar que ella no tenía claro casarse y fue el conocer a Ted Hughes, también poeta, lo que la convenció. Él fue una de las personas más alejadas del machismo, ya que se turnaban para escribir, incluso cuando tenían dos hijos que atender. Si no hubiera sido por un marido como Ted, probablemente no se habría casado por miedo a que el matrimonio le costara el sacrificio de su vocación de escritora. En su novela, ya citada, describe el matrimonio convencional como un estado totalitario: "También recuerdo a Buddy Willard diciendo, con una seguridad siniestra, que una vez que me casara me sentiría diferente, que no iba a querer seguir escribiendo poemas. Entonces pensé que quizá fuera verdad, que cuando uno se casaba y tenía hijos era como un lavado de cerebro, y que después una iba por el mundo sedada como un esclavo en un estado totalitario".

En cuanto al abandono de Ted, eso ya es entrar en especulación, pero el matrimonio sufría muchísimo cuando ya tenían dos hijos. En sus diarios, ella deja claro que el cuidado de los niños causaba conflictos tanto entre la pareja como en el trabajo que tenían como escritores. Sylvia Plath luchó por representar varios papeles que a menudo resultaban contradictorios, o por lo menos conflictivos entre sí: era madre, esposa, amante, artista.

Sylvia Plath es como una heroína trágica, como un símbolo para la humanidad ante el peligro del suicidio. O más bien, ante el peligro de dejar morir su vida espiritual, porque el estado en que se encuentra el mundo moderno parece ser que la muerte de lo espiritual es necesaria para sobrevivir. Sylvia Plath prefirió volver a la tierra antes que dejar morir esa parte tan esencial.

En su epitafio a Sylvia Plath, Anne Sexton cita un fragmento de una carta de Kafka: "Un libro debería ser como un hacha ante el mar congelado que tenemos dentro".
 Y Syliva Plath fue una mujer que dio hachazos por el mundo por medio de su arte.

by Lisa Liibbe Lara
http://www.sylviaplath.de/plath/lisaarticle.html